Atún encebollado

Aprovecharemos que todavía hasta final de junio, estamos en temporada de atún. Es un producto suculento de nuestras costas Andaluzas y aunque el atún rojo de almadraba, no es nada económico, no debemos perder la oportunidad de consumir éste gran manjar.

                              

  INGREDIENTES:        

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              -1 Kg de atún cortado en daditos

-           - 2 cebollas grandes

-           - 2 dientes de ajo

-           -  1 hoja de laurel

-           - 1 cucharadita de pimentón dulce

    -Sal

-           -½ vaso de vino blanco

-          - Aceite virgen extra

-          - Orégano

-          - Pimienta blanca (opcional)

ELABORACIÓN:

1º. Cortamos la cebolla en juliana (tiras largas) y los ajos en láminas. El atún lo cortamos en trocitos de tamaño mediano y lo más regular posible.

2º. Tomamos un rondón o cazuela y en él echamos un poco de aceite de oliva. Vamos a marcar un poco el atún. Le añadimos un poco de sal y si se quiere es el momento de poner un poquito de pimienta blanca, pero poca, solo para darle un poco de chispa al plato.

Primero por un lado, dejamos que se dore un poquito y con una espátula le damos la vuelta con cuidado de que no se nos parta. Cuando esté por el otro lado lo apartaremos en un plato. 

Conseguiremos así que conserve sus jugos en el interior y que no se nos deshaga en el guiso.

3º. En el mismo rondón o cazuela, una vez apartado el atún, echamos la cebolla,  cortada en juliana fina (tiras) y los ajos fileteados. Los rehogamos, a fuego moderado, moviendo de vez en cuando hasta que la cebolla se ponga rubia y transparente. Cuando esté, incorporamos el pimentón dulce, removemos y apartamos rápidamente del fuego para que no se queme.

Una vez hecho ésto añadimos el vino otra vez en el fuego. Dejamos que se reduzca totalmente hasta que no percibamos olor a vino.

Añadimos una hoja de laurel.

4º. Introducimos los trozos de atún y el juguito que ha soltado en el plato. 

Removemos suavemente.

Dejamos que cueza hasta que el atún esté tierno. Es mejor mover la cazuela cogiéndola por las asas y darle un meneo circular y no introduciendo la cuchara en el guiso, para no deshacer los trozos.

Añadimos un poco de orégano y probamos de sal.

Es un plato que requiere poco tiempo de elaboración y bastante  sencillo. 

Constituye un buen primer plato que se puede acompañar de una ensalada verde, tomatitos cherris de colores, aliñados, etc. y de alguna sopa fría.